El Metro de la Ciudad de México, es el medio de transporte en donde más de seis millones de personas se mueven diariamente, aunque también es zona laboral de más de 10 mil bocineros.
Con esta bocina es con la que me subo, quizá se vea algo grande de tamaño pero también consideramos los decibeles, todo eso para que la gente se entretenga, lo disfrute; que no sea una causa de estrés y no sea lo contrario de lo que planeamos hacer.
Usuarios del transporte aseguran que el efecto y sonido de las bocinas, en su mayoría mal ecualizadas, es aturdidor:
Llegan, se meten, te empujan, es un poco molesto a veces& en ocasiones vas tú relajado y ponen música y es castrante" afirma Román Sevilla, usuario del Metro.
Por su parte Karina Gallardo afirma que "ellos se suben a hacer su escándalo pues es muy molesto, de por sí vas estresado con el transporte y luego que el Metro se detiene y todavía ellos se suben a estresarte más".
- Los ruidos que producen generan molestia
Javier Trovamala, especialista en acústica y vibraciones mecánicas, diagnostica irritabilidad, depresión y ansiedad porque es un mecanismo que funciona de manera instintiva y produce daño en el mecanismo de la audición.
Los daños en el oído son irreversibles, estamos hablando que una bocina que está a 50 o 40 centímetros del oído puede rebasar fácilmente los 100 decibeles o inclusive acercarse al umbral de dolor que son 120 decibeles y producir un trauma acústico, pueden afectar desde el punto de vista cardiovascular, pueden afectar cuestiones metabólicas, endócrinas, neurológicas, entre otras concluyó Trovamala quien es ingeniero egresado del Instituto Politécnico Nacional.
Datos de la Procuraduría Ambiental y de Ordenamiento Territorial, PAOT aseguran que el nivel del ruido en un vagón del metro es normalmente de 70 a 80 decibeles, es decir a 50 decibeles por debajo del umbral del dolor que es 120, sin embargo al subir el bocinero, lo eleva hasta 110, sólo 10 detrás de una crisis.
Michelle Arzuela usa este transporte desde hace 20 años y argumenta que desde hace 10 años el problema de los bocineros no ha sido detenido del todo: No les importa si las personas llegan de trabajar o están pasando un mal momento simplemente van a lo que van y molestan a las demás personas.
Las autoridades del Sistema Colectivo Metro consideran estar poniendo stop a sus play ist:
En 2017, en el mes de febrero, se destruyeron 162 bocinas o 169 mochilas que en su interior tenía de dos hasta tres bocinas con su fuente de poder; a la fecha podemos decir que tenemos erradicado, o disminuido en un 90%, esta actividad y solamente nos queda un escaso 10% que se concentra básicamente en la Línea 2... asegura Enrique Sánchez Altamirano, gerente de Seguridad General del Metro.
Los vendedores de discos, débiles visuales que cantan o artistas, todos entran en la categoría de bocineros, pero aseguran ser víctimas de usuarios que no toleran su música.
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