El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció que ha entablado comunicación con la Asociación Nacional del Rifle (NRA, por sus siglas en inglés), a quien aseguró que no se pasarán por alto las posiciones de la organización sobre el derecho de portar armas en la respuesta de Washington a las masacres más recientes.
El mandatario, dijo que está conversando con la NRA y otros para garantizar que sus muy fuertes posiciones sean escuchadas y respetadas. Además de reconocer el dialogo entre los líderes de la Cámara y el Senado sobre verificaciones control de armas.
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Sin embargo, Trump se dijo el mayor defensor de la segunda enmienda, que garantiza de manera constitucional el derecho de todos los ciudadanos estadounidenses a poseer y portar armas, entre ellas las de fuego.
A través de su cuenta oficial de Twitter, el multimillonario publicó lo siguiente
Las armas no deben colocarse en manos de personas con enfermedades mentales o desquiciadas. Soy la persona más importante de la Segunda Enmienda, pero todos debemos trabajar juntos por el bien y la seguridad de nuestro país. ¡Se pueden hacer cosas de sentido común que sean buenas para todos!, externó el mandatario.
Por su parte, Wayne LaPierre, director general de la NRA, se pronunció sobre el control de armas que se volvió a debatir después de la masacre en El Paso, Texas, que dejó 22 muertos.
Les restarán a millones de estadounidenses respetuosos de la ley la seguridad y la capacidad de defenderse a sí mismos y sus seres queridos, sentenció LaPierre.
Los líderes de las dos cámaras mantienen discusiones serias sobre la averiguación de antecedentes en la compra de armas.