Hillary Clinton no tiene energía, es una chillona y no tiene nada a su favor excepto el hecho de ser mujer, así es como el republicano Donald Trump calificó a la precandidata demócrata en una nueva estrategia política.
"Sin la carta de ser mujer, Hillary no sería apta para ninguna candidatura, ni siquiera para un concejo municipal". Donald Trump
El también precandidato por la presidencia de Estados Unidos ya antes mostró una afinidad por lanzar insultos contra sus adversarios: se mofaba del "chiquito" Marco Rubio y "el debilucho" Jeb Bush. Ahora dice que lo único que Clinton sabe hacer es "jugar la carta de ser mujer".
"Francamente lo único que estoy haciendo es decir lo obvio", insistió Trump cuando se le preguntó si sus insultos no estaban rayando en sexismo.
Es posible que esa retórica le caiga bien a un sector del electorado, pero en otras partes causa indignación. Para muchos, ese tipo de ataques son incomprensibles en momentos en que Estados Unidos se ve inmerso en debates más profundos sobre género:
- El matrimonio homosexual
- Los derechos de las personas transgénero, incluso para tener sanitarios propios en lugares públicos