El presidente chileno, Sebastián Piñera, anunció este sábado que pidió a sus ministros poner sus cargos a disposición con el fin de reestructurar su gabinete y enfrentar las nuevas demandas surgidas en el peor estallido social que ha vivido este país desde el retorno de la democracia en 1990.
Tras la histórica marcha de este viernes que solo en Santiago reunió de forma pacífica al menos un millón de personas -sin distintivos políticos ni clases sociales- Piñera aseguró haber entendido el mensaje.
Estamos en una nueva realidad, Chile es distinto al que teníamos hace una semana atrás. He pedido a todos los ministros poner sus cargos a disposición para poder estructurar un nuevo gabinete, para poder enfrentar estas nuevas demandas", dijo Piñera en un mensaje a la nación desde el Palacio de La Moneda.
Uno de los ministros más cuestionados por la opinión pública es el titular de Interior y Seguridad Pública, Andrés Chadwick, quien también es primo hermano del mandatario.
Piñera también anunció que "si las circunstancias lo permiten", levantará el domingo el estado de emergencia en todo el país, tras una semana de fuertes protestas iniciadas por el aumento del precio del metro y extendidas a otras demandas sociales, que incluyen un cambio en el criticado sistema privado de pensiones, creado durante la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990).
Levantan toque de queda en Santiago
Las Fuerzas Armadas de Chile anunciaron este sábado que decidieron levantar el toque de queda que regía desde el sábado pasado en Santiago, una ciudad que empieza a volver a la normalidad tras un estallido social sin precedentes.
Se ha evaluado que las actuales condiciones permiten resolver que NO habrá Toque de Queda en la RM (región metropolitana) a partir de este momento", dijo el ejército en un comunicado.
Esta medida llega un día después de una histórica manifestación de más de un millón de personas que este viernes por la tarde llenaron las calles de Santiago para exigir reformas a un sistema económico que consideran desigual.
Las protestas estallaron el viernes 18 de octubre con ataques al metro de la ciudad y violentos saqueos a supermercados y centros comerciales detonados por el aumento al boleto del metro.
Los manifestantes sumaron luego más demandas sociales, expresando su frustración con un modelo económico que si bien es exitoso ha dejado que se concentre la riqueza en unas pocas familias, con alta participación de las empresas privadas, dejando un estado ausente en pensiones, educación y salud, entre otros.