A pesar de ser una figura pública e internacionalmente reconocida en todo el mundo, la reina Isabel II demostró que puede pasar desapercibida y ser vista como una abuelita común frente a algunas personas despistadas.
Fuentes cercanas a la Familia Real Británica confirmaron al medio The Times que durante una caminata en los alrededores del Castillo de Balmoral, su mansión de vacaciones que se ubica en Aberdeenshire, Escocia, la monarca platicó brevemente con unos estadounidenses sin que éstos se percataran de que era la mismísima reina Isabel II.
De acuerdo con la fuente, los estadounidenses preguntaron a la reina si ella vivía en esa zona, a lo que ella sólo respondió que tenía una casa ahí, sin especificar que se trataba del hermoso castillo que admiraban.
Además, los turistas le preguntaron si alguna vez había tenido la oportunidad de ver a la reina del Reino Unido, a lo que ella contestó: No, pero aquel oficial sí, señalando al elemento de seguridad que la acompañaba.
Las fuentes de la Familia Real aseguraron que a la reina disfruta pasar desapercibida cada que hay oportunidad; por ese motivo, cuando es posible porta un pañuelo en la cabeza y un abrigo común.