El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, llamó a todas las partes involucradas en el conflicto en Turquía a apoyar al gobierno "democráticamente electo" del presidente Recep Tayyip Erdogan, en momentos en que un golpe de Estado está en curso en el país.
Obama instó también -tras una conversación telefónica con su secretario de Estado, John Kerry- a "dar muestras de contención y evitar violencia y derramamiento de sangre" en Turquía, donde murieron policías y soldados dispararon en contra de una multitud.