El expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva se entregó este sábado a la policía, para empezar a cumplir una pena de más de 12 años de cárcel por corrupción pasiva y lavado de dinero
Lula, de 72 años, salió a pie del Sindicato de Metalúrgicos de Sao Bernardo do Campo, en el estado de Sao Paulo, donde estaba atrincherado desde hacía dos días, para subir a un vehículo de la Policía Federal, que partió escoltado por una caravana de otros coches, mostraron imágenes aéreas de TV Globo.
[ Leer: Lula confirma que se entregará a la justicia; manifestantes no lo dejan ]
El convoy fue llevado al aeropuerto de Congonhas; desde allí, Lula fue trasladado a Curitiba, a menos de una hora de vuelo, donde debe pasar su primera noche en una celda especial de 15 metros cuadrados, con baño privado.
Previamente, decenas de simpatizantes de su fuerza política, el Partido de los Trabajadores (PT), le habían impedido salir de la sede del sindicato, dando lugar a tensas escenas.
[ Leer: ¿De qué se le acusa a Lula da Silva, el hijo de Brasil? ]
Lula anunció su intención de entregarse unas horas antes, al final de una misa frente a la sede sindical, en memoria de su esposa fallecida el año pasado. El expresidente fue condenado como beneficiario de un apartamento ofrecido por la constructora OAS a cambio de facilidades de contratos en Petrobras.
¡Denuncia en Uno!
¿Conoces o tienes fotos y videos de algún acto de posible negligencia, corrupción y abuso de autoridad? Mándalo al WhatsApp de Uno TV: 5562115131. ¡Compártelo! Nosotros le damos seguimiento.