Anthony Fauci, Director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas, aseguró que si Estados Unidos no se prepara para una segunda oleada del coronavirus, podrá tener un otoño y un invierno muy complicados.
Si en ese momento hemos implementado todas las contramedidas que necesita para abordar esto, deberíamos hacerlo razonablemente bien, si no lo hacemos con éxito, podríamos tener un mal otoño y un mal invierno", dijo en el club económico de Washington, DC.
Fauci recalcó que si los estados empiezan a modificar las restricciones de movilidad pronto, sería malo para la nación, pues podrían tener una segunda oleada de casos.
El país podría ver un rebote del virus que nos llevaría de vuelta al mismo barco que estábamos hace unas semanas. En el país podría haber muchas más muertes de las que se predicen actualmente".
Asimismo, el Director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas mencionó que abrir el país económicamente deberá ser con mucho cuidado.
A medida que intenta relajar la mitigación, si tenemos la capacidad de identificar, aislar y rastrear contactos de una manera altamente efectiva y eficiente, los números se mantendrán bajos. Puede ser 80 mil o 70 mil como dice el modelo".
Fauci dio estas declaraciones cuando la administración Donald Trump dio a conocer un "plan" para que los estados amplíen sus pruebas en la próxima semana, una admisión tácita, a pesar de las declaraciones públicas en contra, de que la capacidad de prueba y la disponibilidad en los últimos dos meses han faltado.
Las áreas que han sido más afectadas por el virus podrían realizar pruebas al doble de esa tasa, o más, dijo la Casa Blanca.
La prueba inicial COVID-19 desarrollada por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades estaba contaminada, y los primeros kits operaban solo en plataformas capaces de realizar una pequeña cantidad de pruebas por día.
Si bien la tasa de pruebas aumentó a medida que las pruebas se desarrollaron para plataformas de mayor capacidad, todavía estaban limitadas por la escasez de suministros, desde hisopos nasales hasta los reactivos utilizados para procesar las muestras.