Nadie va a olvidar el 21 de enero de este año 2020, cuando se registraba el primer paciente enfermo por coronavirus y que hasta la fecha, ha dejado más de 100 mil muertos en los Estados Unidos.
La cifra queda marcada no solamente en Estados Unidos sino fuera del país, por que se trata de la potencia mundial. Esta cifra refleja el fracaso de los Estados Unidos para enfrentar la pandemia, pero también el fracaso en una serie de dificultades que tienen los estadounidenses frente a las grandes desigualdades económicas, sociales y raciales.
Esta pandemia deja en claro que está afectando básicamente más a las comunidades afroamericanas y latinas en Estados Unidos. Las cifras hablan por sí solo. En Estados Unidos el 13% de la población es afroamericana, sin embargo, el 23% de las muertes por causa de coronavirus han sido afroamericanos.
- En Washington DC, en la capital también hay un triste ejemplo, y es que el 46% de la población de Washington DC es afroamericana y, de nuevo el 76% de las víctimas por coronavirus en la capital de Estados Unidos han sido afroamericanos.
- Si se compara, por ejemplo, con los blancos, que son 37% de la población en esta ciudad y son el 11% de las muertes por coronavirus, existen cifras muy similares en los estados de Nueva York. En Minneapolis y también en Illinois y Michigan.
Las desigualdades de ingreso, la falta de acceso a las medicinas y atención médica son algunos de los factores que están afectando más a los afroamericanos y a los latinos. Y esto, por supuesto, se suma al racismo y a la discriminación frente a la justicia en los Estados Unidos.
Independientemente de estos datos, todo mundo comienza ya a preguntarse constantemente en las consecuencias sociales, políticas y, sobre todo económicas que va a arrojar finalmente este coronavirus
Resulta que 41 millones de estadounidenses están sin empleo y la cifra, de acuerdo con el Departamento del Trabajo estadounidense va aumentando.
Sin duda el gobierno tiene frente a sí una dificultad muy grande y a medida que transcurren las semanas Estados Unidos se quiere implementar estrategias para que se reabran paulatinamente los sectores escenciales y económicos. Cada jurisdicción determinará en qué momento reabre pero por supuesto, manteniendo el distanciamiento social y el uso de la mascarilla.
Pero la gran carencia en Estados Unidos en este momento es la falta de una estrategia nacional, no solamente para hacer frente a la pandemia, porque no ha podido solucionar, por ejemplo, el hecho de que se necesitan equipos de protección para los doctores, para los médicos, para las enfermeras y enfermeros, sino que además no hay una distribución a nivel nacional homogénea para las pruebas de diagnóstico que tanto se necesitan.
Los expertos le han recomendado al presidente que tenga mucho cuidado en promocionar y proponer que se reabra la economía de los Estados Unidos y que cada estado comience a abrir negocios. María Luisa Rosell / Corresponsal
Por supuesto son muy importantes para evitar que sigan perdiendo empleo los estadounidenses, pero al mismo tiempo, si no hay una distribución masiva de pruebas de diagnóstico y no se atienden las demandas de los hospitales y las carencias que hay a nivel nacional, la Estrategia Nacional seguirá fracasando.