Al menos dos intoxicados con cloroquina, un medicamento utilizado en el tratamiento contra la malaria y que ahora se está ensayando para curar el nuevo coronavirus (COVID-19), han sido ingresados en hospitales de Lagos, la capital económica de Nigeria.
La cloroquina, que durante décadas ha sido utilizada contra la malaria, está siendo objeto de ensayos clínicos alentadores en un pequeño número de pacientes en China y Francia, como posible tratamiento contra el nuevo coronavirus (Orthocoronavirinae).
El presidente estadounidense, Donald Trump, anunció el jueves que el país recurrirá de manera inminente a la cloroquina para luchar contra el nuevo coronavirus (COVID-19) y aseguró que esperaba que esté "disponible casi inmediatamente" y bajo receta médica.
Sin embargo, muchos expertos han instado a la prudencia al subrayar la ausencia de datos clínicos sólidos sobre sus efectos secundarios.
Desde hace varios días, se ven circular muchos mensajes en las redes sociales ensalzando los efectos de la cloroquina para curar el coronavirus y nos hemos enterado de que el medicamento no está disponible en muchos barrios de Lagos", explicó Ore Awokoya, asesora de Salud del gobernador de Lagos.
Sin embargo, el anuncio del presidente Donald Trump ha volcado a las personas a las farmacias a buscar cloroquina.
Pero después de las declaraciones de Donald Trump sobre este medicamento, esto ha tomado otra dimensión. La gente ha llegado en tromba a las farmacias para comprar cloroquina", agregó.
Efectos secundarios de la cloroquina
De acuerdo con especialistas, la ingesta de este medicamento puede tener efectos secundarios:
La cloroquina, comercializada bajo nombres diferentes dependiendo de los países, suele ser recomendada en los viajes a lugares infestados por el mosquito de la malaria, el anopheles.