El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, informó sobre la firma del decreto que limitará inmigración legal hacia el país del norte, esto como una manera de combatir las altas cifras de desempleo que se vive tras la propagación del coronavirus (orthocoronavirinae).
Tal como lo había anunciado a principios de la semana, el mandatario detalló que este decreto se aplica para los individuos que buscan la residencia permanente por 60 días en Estados Unidos, país que acumula el mayor número de casos confirmados de coronavirus.
"Para proteger a nuestros magníficos trabajadores estadounidenses, acabo de firmar una orden ejecutiva para suspender temporalmente la inmigración hacia Estados Unidos". Donald Trump, presidente de Estados Unidos.
El decreto tendrá como propósito limitar la competencia por los empleos, ahora que la economía nacional se ha visto azotada por la pandemia del coronavirus. Esto incluiría a quienes soliciten permisos de residencia permanente vinculados a un empleo y a parientes de titulares de esos documentos que no son ciudadanos estadounidenses.
A seis meses de las elecciones en las que Donald Trump buscará la reelección, el mandatario aseguró que el decreto va a asegurar que sean los desempleados estadounidenses los que estén en "primera línea" cuando la economía se reactive y para el hace días anunció la reapertura.
En la conferencia que ofrece de manera diaria por motivo del coronavirus, Donald Trump dijo que es "alentador" ver cómo algunos estados comienzan a reabrir; sin embargo, expresó que tenía algunos desacuerdos con el gobernador de Georgia, Brian Kemp, por su decisión de abrir algunos recintos, como peluquerías o spas, pues consideró que "se podía esperar un poco".
Trump ha defendido desde hace mucho tiempo las restricciones a la inmigración legal e ilegal, sobre todo porque considera que los extranjeros compiten con los ciudadanos estadounidenses por empleos.
El cese de actividades y la cuarentena decretada por Estados Unidos para mitigar los contagios del coronavirus que surgió en la ciudad de Wuhan, China, a finales del año pasado, desataron una grave crisis que. desde mediados de marzo, al menos 22 millones de personas pidieron ayuda tras perder sus empleos.