Cao Junjie, un papá chino, creó un traje inflable para proteger a su pequeño del coronavirus. Su idea surgió, ya que encontró uno en internet, así que decidió fabricarlo y hacerle algunas modificaciones.
El traje blanco tiene un ventilador eléctrico con función de purificación de aire, aunque también cuenta con un dispositivo para controlar la calidad del aire dentro del traje.
Este es mi invento, un traje espacial de presión positiva. Espero que mi hijo pueda usarlo en medio de la epidemia y espero brindarle protección total en forma aislada". Cao Junjie, creador.
El diseño del traje de protección es muy simple, cuenta con tres máscaras médicas que se convierten en un filtro para aislar el aire. También tiene un monitor de calidad del aire en la parte delantera para controlar el aire del interior y ofrecer un entorno seguro.
Cao también contó que el traje es ideal para los niños pequeños, ya que las máscaras son incómodas para los menores debido a que se pueden tocar la cara constantemente.
El usuario puede hacer la mayoría de las cosas mientras usa el traje, excepto soplar burbujas". Cao Junjie, creador.
No es la primera vez que Junjie hace algo así, hace unas semanas diseñó una cápsula de seguridad para bebés para su pequeño de dos meses.
Salidas más seguras
Cao y su familia han decidido salir a disfrutar los días soleados en China, después de que ese país fuera el primero en registrar casos de coronavirus a finales del año pasado.
Cao y su hijo llamaron la atención de algunas personas por los voluminosos trajes que portaban, sin embargo con estos trajes buscan la prevención del COVID-19.
Creo que es genial. Parece un personaje de dibujos animados. Normalmente los niños tocan su máscara cuando la usan. Ahora puede respirar libremente y sus manos no tocarán la máscara o la cara". Mujer que estaba en el parque.
Coronavirus en el mundo
El coronavirus estalló por primera vez en la ciudad china de Wuhan a finales de año pasado y se extendió por todo el mundo.
- Actualmente hay más de 1.8 millones de personas infectadas y han muerto alrededor de 100 mil personas en todo el mundo.