El Senado de Bolivia se reúne este martes para llenar el vacío de poder generado tras la renuncia del presidente Evo Morales, esperado en México en calidad de asilado político como desenlace de tres semanas de crisis tras las cuestionadas elecciones del 20 de octubre.
Los parlamentarios están convocados a una sesión para ratificar la renuncia de Morales y en la que se espera que se designe presidenta interina a Jeanine Añez, segunda vicepresidenta del Senado, ante la dimisión en bloque de los altos cargos leales al líder indígena que dimitieron y que la precedían en la línea de sucesión.
"Ésta es la intención, espero que podamos conseguirlo. No podemos estar en desgobierno". Añez.
Bolivia vive sumida en un vacío de poder desde el domingo, cuando Morales dimitió en medio de fuertes presiones y episodios violentos surgidos tras los controvertidos comicios.
Está por ver si los senadores de todas partes del país consiguen llegar a La Paz, después de que ayer lunes estuviera marcado por actos violentos. Las calles de La Paz despertaron el martes paralizadas, sin transporte público y el servicio de teleférico, básico para la movilidad de la ciudad, detenido.
Añez, de 52 años, dijo estar confiada en que el Senado conseguirá reunir a los 19 de los 36 escaños necesarios para poder llevar a cabo la sesión, ya que "parlamentarios del Movimiento al Socialismo (el partido de Morales) también están dispuestos a que esta incertidumbre, a que este vandalismo y esta inestabilidad que tenemos en el país se termine".
"Tenemos ya un calendario. Creo que la población grita por que el 22 de enero tengamos ya un presidente electo", dijo el lunes a la prensa Añez, evocando la fecha prevista para la toma de posesión presidencial. Ella aparece como probable reemplazante de Morales tras la dimisión de todos los que la precedían en la línea de sucesión.