El huracán Matthew, que se fortaleció y se ubica en categoría 4, en la escala Saffir-Simpson, continúa su paso en dirección hacia el sureste de Estados Unidos tras dejar al menos 261 muertos, en su mayoría en Haití, en su paso por el Caribe.
Ante esto, el presidente Barack Obama declaró el estado de emergencia en Florida conforme el huracán Matthew se transformó en un ciclón "extremadamente peligroso", en su paso por la costa este estadounidense.
La declaración de emergencia permitirá al gobierno federal asignar recursos extraordinarios al estado, adicionales a los equipos de rescate y abastos que se movieron anticipadamente a la entidad.
Los gobiernos de los estados de Florida, Georgia, Carolina del Norte y Sur ordenaron evacuar a los habitantes de su litoral ante el acercamiento del huracán. Sus respectivas carreteras se congestionaron y los suministros escasearon en las estaciones de servicio y tiendas de alimentos antes de la llegada del huracán, que se espera llegue en la madrugada del viernes, que trae acompañado un fuerte aumento del nivel del mar, fuertes lluvias y vientos.
Los refugios del este de Florida se encuentran abarrotados. En los cuatro estados hay equipos federales de respuesta a las emergencias coordinando los esfuerzos con funcionarios y reuniendo suministros.
"Si viven en una zona de evacuación, necesitan salir ahora y llegar a una zona segura... El tiempo se agota. No hay excusas, tienen que evacuar, evacuar, evacuar". Rick Scott, gobernador de Florida