No hay corazón roto que unos tacos no puedan curar, pero el caso de este hombre es mucho más extremo.
Esta persona originaria de Guerrero pensó en quitarse la vida aventándose de un puente localizado en las avenidas Ticoman e Insurgentes. Este joven pretendía ser arroyado en la Ciudad de México. Las personas que vieron sus intenciones, decidieron llamar a emergencias para evitar una tragedia.
Tacos al rescate
Así, llegaron los policías para convencer a aquél hombre de no lanzarse por el puente. A pesar de sus intentos, sólo lograron persuadirlo con unos tacos.
El suicida se encontraba en estado de ebriedad y al parecer la idea de cenar tacos fue irresistible para el mexicano. La comilona se llevó a cabo a bordo de la patrulla, el hombre contó que había sido motivado por su depresión y la tristeza de estar perdido en la ciudad.
Por su parte, los policías se encargaron de buscar ayuda. Finalmente, fue aceptado en la agencia especializada 59 del ministerio público, donde le brindaron atención. El consuelo de este hombre fue aquella cena, en la que unos tacos le hicieron pensar mejor su situación.