"Estigma" es la palabra que más se repite en la novena Convención de Tatuadores de Bogotá, un evento que busca acabar con el tabú social que genera el arte corporal.
Más de 250 tatuadores de 14 países se dan cita en la ciudad colombiana, entre ellos, María José Cristerna, mejor conocida como la "Mujer vampiro", quien tiene el 97% de su cuerpo modificado con tatuajes y otras alteraciones.
"Colombia es un país que está por encima en nivel de tatuaje, en la cultura en general. A la gente le gusta mucho lo distinto que es, lo pintoresco que es", explicó Juan Paez, uno de los organizadores de la convención.
Ese ambiente pintoresco es el que predomina en una cita que recibe a los nueve mil visitantes esperados con el ruido constante que caracteriza a las máquinas tatuadoras y que acompaña el auditorio Gonzalo Jiménez de Quesada de Bogotá ininterrumpidamente.