Rebelde, talentosa y adelantada a su tiempo, Leonora Carrington es una de las mayores exponentes del arte surrealista en el mundo. Pero también una de las más fuertes voces del movimiento feminista en México.
Este 6 de abril la artista cumpliría 101 años. Nació en Lancashire, Inglaterra, y desde muy joven se rebeló contra su padre. Conoció a su mentor y primer amor Max Ernst a los 20 años, con quien se fugó para vivir un tórrido romance que sus padres no aprobaban, ya que el pintor alemán era 27 años mayor que ella y estaba casado.
Con su vida, sus acciones, su pensamiento y su obra, Carrington demostraba que nada la ataría y luchó por abrirse camino en el mundo del arte. Previo a su fuga con Max Ernst, fue mandada por su padre a un internado en Florencia, Italia, con la esperanza de que se convirtiera en una señorita decente. Sin embargo, ella escapó varias veces hasta que en 1936 logró irse a Londres e inscribirse en la academia del pintor Amédée Ozenfant.
Una rebelde con causa
Al año siguiente conoció a Max Ernst, quien la acercó al mundo del arte surrealista. Después vino la Segunda Guerra Mundial y con ello los primeros pasos activistas de Leonora. Ella y Ernst se unieron a un grupo clandestino de intelectuales antifascistas.
Sin embargo, en 1939 el pintor fue detenido por los Nazis y enviado a un campo de concentración. Esta separación produjo en Leonora una crisis nerviosa que la llevó a un psiquiátrico en Santander, España. Al salir de ahí, huyó a Lisboa, Portugal, donde conoció al escritor y entonces embajador mexicano Renato Leduc, con quien se casó, aunque sólo estuvieron juntos un año.
Así empezó su historia en México y su lucha en nuestro país por la libertad de las mujeres. Se casó con el escritor y se vino a vivir a nuestro país, que se convertiría en su hogar permanente hasta que murió en 2011, a los 94 años de edad.
La pintora siempre recalcaba la importancia de alcanzar esa libertad y la opresión del sexo femenino en la sociedad. En una entrevista con la periodista Beatriz Espejo, Carrington demostraba su preocupación por el tema, más allá del arte y su obra.
"¿Su revista procura ayudar a sus lectoras a superarse o a estupidizarse? Le pregunto esto porque me interesa mucho hablar de la situación de la mujer en México y de procurar que se vuelva libre". Leonora Carrington
La mujer en su obra
No es ningún secreto lo difícil que era para las mujeres abrirse paso en cualquier profesión, y la pintura no era la excepción. Pocas mujeres destacan en este arte en México como Leonora Carrington, Remedios Varo o Frida Kahlo, todas artistas que levantaron la voz contra el predominio del hombre en todos los aspectos de la vida social. Al respecto, Carrington acusaba la discriminación que sufrían.
"En mi terreno hay una discriminación tremenda. Uno lucha contra eso y pierde su identidad femenina, de hembra. Todos los seres humanos somos criaturas del reino animal. Necesitamos mantenerlo presente porque solemos olvidarlo". Leonora Carrington
La influencia del movimiento feminista en su obra podemos verla en varias de sus pinturas. La más clara quizá sea el cartel "Mujeres Conciencia" que pintó en 1972, con el que manifestaba su inconformidad con la represión femenina.
"La sociedad entera procura aún que las mujeres no seamos libres. Nos considera animales inferiores". Leonora Carrington
Hoy día, la influencia y notoriedad de Leonora Carrington es indudable, pues no sólo su obra aparece en los rincones de la Ciudad de México y engrandece exposiciones en museos de todo el mundo, también su rebeldía, su alma agreste y su afán por nunca detenerse la volvieron un estandarte de la lucha femenina por la libertad.
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