Luego de más de 20 años, el actor Leonardo DiCaprio fue nombrado mejor actor del año en la entrega 88 del Óscar, esto gracias a su interpretación en "El Renacido", cinta dirigida por el mexicano Alejandro González Iñárritu.
Sin embargo, más tardó en ganar el Óscar que en perderlo, pues luego de su esperada victoria, el actor decidió celebrar en el restaurante West Hollywood, lugar donde casi deja la famosa estatuilla, informó el sitio web TMZ.
Entre un cóctel y un cigarro electrónico, DiCaprio pasó un buen rato en la fiesta siendo el centro de atención, por lo que a su salida fue inevitable notar que alguien le recordó la estatuilla que había dejado.