Lo bueno de ser una celebridad de la talla de Britney Spears es que todo, absolutamente todo, está permitido, y para demostrarlo, la presentadora y humorista Ellen DeGenere llevó a cabo un experimento en una conocida plaza comercial de Los Ángeles.
El experimento consistía en hacer todo lo que ellas quisieran, pues amparadas en "la fama" sus actos no tendrían consecuencias mayores, y así fue, pues entraron a cuanta tienda quisieron, se probaron lo que quisieron, subieron escaleras eléctricas en sentido contrario, comieron helado gratis y hasta dieron puñetazos a un saco de boxeo decorativo.
Ir a un centro comercial acompañado de un famoso te permite hasta "robar", pero no te confundas, si eres una celebridad ese no es un delito, es por ello que Ellen invitó a robar a la "Princesa del Pop", quien por momentos dudó en hacerlo, pero total, ¡es Britney!, y sin más, tomó el bolso que conquistó su corazón y continuaron su loco y desenfrenado experimento.