Si quieres cambiar tu vida, tienes que cambiar tus hábitos. Son pequeñas transformaciones pero si las conviertes en una constante, verás el cambio tan grande y positivo que tendrás en tu vida.
Atrévete a intentarlos en tu día a día:
Haz 1 hora de ejercicio al día:
Probablemente no te guste mucho correr o ir al gym pero puedes buscar otras opciones para ejercitarte, al final resultará divertido y verás cambios increíbles en tu cuerpo.
Toma 2 litros de agua:
Tomar agua es ideal para que expulses las toxinas que no necesitas. Este hábito hará que te sientas con más vitalidad y energía a lo largo del día.
Toma 3 tazas de té:
Una en la mañana, una a medio día y una en la noche. El té verde te ayudará a acelerar tu metabolismo, limpiar tu cuerpo y además sabe muy rico.
Come 4 frutas:
Existen frutas que tienen mucha azúcar y no ayudan mucho pero también existen otras que puedes comer sin preocuparte, además de ser muy ricas y buenas para tu cuerpo, por ejemplo: manzanas, un plátano, sandía y papaya.
Ten 5 comidas:
¿Sabías que una alimentación balanceada tiene tres comidas y dos colaciones? Sería ideal que consultaras un nutriólogo, pero si en estos momentos no puedes hacerlo, empieza con desayuno, colación, comida, colación y cena. OJO: El intervalo entre cada una debe de ser de 3 a 4 horas y es importante que no te atasques en todas las comidas, son pequeñas porciones para que quedes satisfecho.
Ríe 6 minutos:
Reír es saludable. Se ha demostrado científicamente que después de reír el cerebro libera impulsos eléctricos que expulsan la energía negativa de nuestro organismo.
Duerme 7 horas:
Dormir es necesario e importante por eso tienes que tener un horario fijo para descansar lo suficiente, además de que dormir nos da energía y nos ayuda a producir ideas nuevas y más creativas.
Así que ya lo sabes, no será fácil pero al final valdrá la pena ver que tu vida da un cambio positivo.