Destaca FMI políticas de inclusión social en México
México, un ejemplo de países que buscan dar un nuevo impulso económico, asegura.
La directora gerente de Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, reconoció este jueves las políticas de inclusión de México, al que puso como ejemplo de países que buscan dar un nuevo impulso económico.
En un discurso en la Universidad Georgetown de Washington en anticipación de la reunión anual del FMI con el Banco Mundial, Lagarde recordó su participación en el Foro Internacional de Inclusión Financiera celebrado en México en junio.
“(México) es un país que trata de incluir a aquellos que particularmente no tienen acceso a financiamiento, que no tienen acceso al mercado laboral y me refiero a los más pobres y con frecuencia a las mujeres”, indicó.
En su discurso ante los universitarios, Lagarde alertó que el mundo enfrenta el riesgo de un “mediocre” nivel de crecimiento a menos de que los liderazgo globales impriman un nuevo impulso económico.
La titular del FMI sostuvo en ese sentido que para estimular el crecimiento de la economía y crear empleos se requiere no sólo de políticas monetarias sino de políticas fiscales, reformas estructurales de trabajo e inversiones públicas en infraestructura.
“Para elevar el consumo y la inversión, necesitamos un robusto crecimiento de empleo y salarios. En particular, necesitamos hacer más fuertes los mercados laborales”, recomendó.
Lagarde hizo notar que 200 millones de personas están desempleadas a nivel mundial, de los cuales 75 millones son jóvenes.
Entre los programas para elevar empleos, propuso políticas laborales de mercado y proyectos de capacitación que apuntalen la demanda por trabajadores, especialmente jóvenes. Como ejemplo puso las políticas de Australia, Alemania y Suecia.
Asimismo, recomendó políticas que aumenten la participación de la mujer como en Japón, donde el gobierno busca expandir la disponibilidad de guardería para alentar a las mujeres a unirse a la fuerza laboral.
Lagarde advirtió no obstante que tales políticas no son suficientes a menos que se mejore el flujo de crédito a la economía.