Culmina proceso legislativo histórico para transformar a México: SHCP
Se permitirá ampliar la oferta de energéticos que requiere el país para atraer más inversiones.
La reforma energética y su legislación secundaria, recientemente aprobada por el Congreso, representa la culminación de un proceso legislativo histórico para la transformación de México, destacó la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
La dependencia apuntó que esta reforma permitirá ampliar la oferta de energéticos que requiere el país para atraer más inversiones, impulsar el desarrollo de las actividades productivas, y la generación de empleos y así mejorar el bienestar de las familias mexicanas.
Señaló que el Gobierno de la República reconoce la labor del Poder Legislativo en la construcción de acuerdos que permitieron aprobar las reformas necesarias para alcanzar el potencial de crecimiento y desarrollo económico del país.
Asimismo, refrendó su compromiso de implementarlas de forma ágil para que sus beneficios se materialicen y se reflejen en los bolsillos de los mexicanos, expuso en el Informe Semanal de su Vocería.
Indicó que después de poco más de tres meses de intenso trabajo legislativo, el 6 de agosto quedó aprobada la legislación secundaria en materia energética que delinea y regula los cambios constitucionales aprobados a finales del 2013. Se trata de nueve legislaciones nuevas y 12 vigentes que fueron modificadas y que regularán la apertura de los sectores petrolero, gas y eléctrico mexicanos a la inversión privada, detalla.
Entre los dictámenes discutidos y aprobados, se establecieron de forma clara y precisa, los recursos que recibirá el Estado por la exploración y extracción de hidrocarburos, y el uso que se dará a dichos ingresos, para ello se expidieron dos nuevas leyes, la Ley de Ingresos sobre Hidrocarburos y la Ley del Fondo Mexicano del Petróleo para la Estabilización y el Desarrollo.
De manera adicional, se modificaron la Ley Federal de Derechos, la Ley de Coordinación Fiscal, la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria y la Ley General de Deuda Pública.
Precisó que con la nueva Ley de Ingresos sobre Hidrocarburos se regulan las características de los contratos y asignaciones para la exploración y extracción de petróleo y gas, las contraprestaciones que recibirá el Estado a partir de estos, y sus obligaciones en materia de transparencia y rendición de cuentas.
Por su lado, con la nueva Ley del Fondo Mexicano del Petróleo para la Estabilización y el Desarrollo se detalla la organización y funcionamiento del Fondo Mexicano del Petróleo que será el instrumento mediante el cual se administren los ingresos que perciba el Estado (distintos a los impuestos) por la extracción del petróleo y los demás hidrocarburos.
De acuerdo con lo establecido en el artículo 28 Constitucional y los transitorios decimocuarto y decimoquinto, el Fondo será un fideicomiso público del Estado que deberá ser constituido por la SHCP en el Banco de México (Banxico) a más tardar en 90 días a partir de la entrada en vigor de la Ley.
Así, se establece al Fondo como el mecanismo para recibir y realizar los pagos de acuerdo con lo establecido en los contratos; contribuir al Presupuesto de Egresos de la Federación por un monto de hasta 4.7% del Producto Interno Bruto (PIB), y administrar el ahorro de largo plazo que se genere por la acumulación de ingresos por arriba de ese nivel.
Sin embargo, precisó que la propuesta fue enriquecida por la Cámara de Diputados, confiriéndole al Fondo facultades adicionales, además que se modificó su estructura para cumplir con las nuevas funciones y asegurar una mayor transparencia en el manejo de los ingresos del Estado, derivados de la exploración y extracción de los hidrocarburos.
Resaltó que las modificaciones aprobadas a la Ley del Fondo Mexicano del Petróleo para la Estabilización y el Desarrollo y a los diversos ordenamientos que regulan su funcionamiento enriquecieron la iniciativa propuesta por el presidente Enrique Peña Nieto, manteniendo la esencia de la misma en cuanto a su propósito y objetivos.
De esta manera, el Fondo se consolida como el mecanismo para administrar los ingresos provenientes del petróleo, con una visión a largo plazo en beneficio de generaciones presentes y futuras.
Señala que con la aprobación de esta nueva legislación, México contará con un instrumento fundamental que le permitirá coadyuvar en la preservación de la estabilidad macroeconómica nacional, y acotar puntualmente la dependencia de las finanzas públicas a los ingresos petroleros.
Asimismo, ampliar los beneficios por la extracción presente de hidrocarburos a futuras generaciones mediante mecanismos preestablecidos: ahorro de largo plazo, fondeo del sistema universal de pensiones, inversión en educación superior y posgrados, inversión en ciencia y tecnología, así como en energías renovables.
También, destinar importantes recursos al desarrollo de infraestructura para el desarrollo nacional, así como para el desarrollo regional de la industria.