Dragon Mart causaría pérdidas por dos mil mdd anuales: Concamin
Ingresarían al país 300 mil toneladas de productos chinos al año.
La Confederación de Cámaras Industriales (Concamin) pidió a las autoridades que antes de proceder con el proyecto Dragon Mart se analice el impacto negativo que pudieran recibir las micro, pequeñas y medianas empresas, ya que su aprobación desplazaría producción local por dos mil millones de dólares al año.
De aprobarse Dragon Mart se generaría la entrada de al menos 300 mil toneladas de productos chinos anuales con un valor de dos mil millones de dólares, que desplazarían a una cantidad equivalente de productos nacionales, ya que este proyecto estimula a la inversión productiva en China y no en México, señala el organismo.
Refiere que China es el mayor proveedor de productos pirata, según el Informe de Estadísticas de Decomisos por Violación a los Derechos de Propiedad Intelectual generado en 2012, además de que ha incrementado la variedad de ese tipo de artículos ilegales.
Lo anterior, acompañado de la emisión de facturas falsas, la declaración de precios menores al precio real de venta de las mercancías, el uso de etiquetas falsas y productos de baja calidad que no cumplen con las normas oficiales, señala la Concamin en su mensaje semanal.
Advierte que todo ello afectaría directamente a una amplia gama de industrias, incluidas cine, música, software, vestido, calzado, textiles, químicos, eléctrico, entre otros.
El integrante de la mesa directiva de la Concamin y coordinador del Consejo Industrial para la atención del proyecto Dragon Mart, Ysmael López García, dijo que sin importar quiénes sean los desarrolladores del proyecto, socios y empresas que lo operen, existen antecedentes de prácticas ilícitas en el comercio chino más que en cualquier otro país.
Asegura que esa nación es la que registra más prácticas de subvaluación, triangulación, subvenciones, piratería, incumplimiento de normas, entre otras.
“En los últimos años, los delincuentes en China han desarrollado cada vez técnicas más sofisticadas para copiar productos legítimos, falsificar una gama más amplia de productos, y han desarrollado nuevos métodos de distribución para minimizar el riesgo de decomiso.
“Ello, sin olvidar que producen imitaciones más costosas o más baratas, según la calidad de la imitación, por lo cual ya no sólo afectan al mercado secundario de menor precio, sino también a quienes compran productos que creen genuinos”, expuso el representante de los industriales.
Según dijo, la falsificación cuesta 600 mil millones al año a nivel mundial, de acuerdo con cifras de la International Anti-Counterfeiting Coalition (IACC), y dos terceras partes de esas falsificaciones se generan en China.
López García cuestiona además “el por qué si este proyecto tiene como mercado final a Estados Unidos, no se establece en tierras estadounidenses y en cambio buscan establecerse en nuestro territorio.
“Se benefician de nuestra proximidad con nuestro principal socio comercial, y aprovechando nuestros incentivos para los mercados extranjeros”, señala.
El directivo de la Concamin aclara que el sector industrial no se opone a la inversión y a la competencia extranjera, siempre que proceda de manera legal.
Por ello, reitera que a las autoridades que antes de proceder con el proyecto Dragon Mart, se analice y contenga el impacto negativo que pudieran recibir las micro, pequeñas y medianas empresas del país.
López García retomó el ejemplo del proyecto en Kalmar, Suecia, donde se creó en 2006 para la exhibición y venta de productos chinos, mismo que fracasó y dejó una deuda al país.