Mayor parte de construcción de aeropuerto será autofinanciable: Peña
Se respetarán derechos de habitantes en la zona, asegura el mandatario.
La construcción del nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México será un proyecto transexenal, un emblema de México que llevarlo a su máxima capacidad requerirá más allá de esta administración, sostuvo el presidente Enrique Peña Nieto.
Resaltó que todas las actividades vinculadas al desarrollo del proyecto se harán con absoluta transparencia y pleno respeto a la ley, garantizando la protección de los derechos de los habitantes de las colonias y comunidades colindantes a esta obra.
Al presentar el proyecto en la Residencia Oficial de Los Pinos, el mandatario federal aclaró que el nuevo aeropuerto se construirá dentro de cuatro mil 430 hectáreas que ya se tienen en la región oriente del valle de México.
Y dijo que el financiamiento de este proyecto, que si bien contará con recursos fiscales, en su gran mayoría será autofinanciable a partir de los ingresos que generará el actual Aeropuerto y el nuevo, una vez que esté en operación.
Señaló que para superar el desafió que se enfrenta con el actual aeropuerto era necesario actuar con visión de largo plazo y no hacer respuestas “temporales”, parciales o incompletas.
Detalló que actualmente el aeropuerto cuenta con dos pistas pero no tiene espacio suficiente para realizar despegues y aterrizajes simultáneos, condición inaceptable en el aeropuerto en una de las metrópolis más importantes en el mundo, que es justamente la del valle de México.
Acompañado por integrantes de su gabinete, gobernadores y el arquitecto Norman Foster, creador del diseño de este proyecto, entre otros, Peña Nieto explicó que el desarrollo del nuevo aeropuerto se realizará en etapas y llevará años llevarlo a su máxima capacidad.
La primera etapa contempla tres pistas de uso simultáneo para transportar a más de 50 millones de personas, mientras que en su segunda fase contará con un total de seis pistas para atender a 120 millones de pasajeros anuales.
Destacó que su construcción dejará una importante derrama económica ya que será una fuente generadora de empleos para las familias de la zona Metropolitana del valle de México.
Detalló que se estima que en todo el proceso de construcción se emplearán directa o indirectamente a más de 160 mil personas y se favorecerá la contratación de cientos de pequeñas y medianas empresas.
Indicó que adicionalmente esta obra de tal impacto requerirá también la ampliación de la red de transporte e infraestructura metropolitana.
Para ello, ratificó que el gobierno de la República trabajará coordinadamente con las autoridades del estado de México y del Distrito Federal, a fin de impulsar los proyectos de infraestructura que faciliten la construcción y operación del nuevo aeropuerto.
El nuevo aeropuerto “será símbolo de modernidad y un gran legado para las futuras generaciones de mexicanos”.