Maestros buscan espacios alternativos de desarrollo profesional: SEP
Están hartos de acudir a cursos sin sentido, descontextualizados de las necesidades de la práctica docente,
Los maestros no pugnan por más cursos, buscan espacios de desarrollo profesional de otra naturaleza: en el lugar de trabajo, en el diálogo con sus pares, en la constitución de redes de intercambio y creación de conocimiento, consideró la subsecretaria de Educación Básica, Alba Martínez Olivé.
Refirió que están hartos de acudir a cursos sin sentido, descontextualizados de las necesidades de la práctica docente, sólo porque a partir de ahí eran candidatos a mejorar en el sistema de estímulos de Carrera Magisterial, que se transformará a partir del 2015.
Explicó que las quejas de los profesores respecto de la formación continua tienen que ver, como quedó muy claro en los Foros de consulta del modelo educativo, con el reiterado e inútil formato de cursos, establecidos sobre todo para dar lugar a puntajes en Carrera Magisterial.
Por ello, invitó a consultar la página http://modeloeducativo.sep.gob.mx, donde se podrán ver las ponencias de la mesa 5, en la que se discutió el desarrollo profesional de los maestros en educación básica, y en la que se expresó el sentido de las reflexiones de los profesores sobre su formación continua y su desarrollo profesional.
Recordó que en esa mesa se recibió 26.7% de las ponencias de los foros de educación básica y en total hubo 1057 menciones a la formación continua de los profesores.
Por otro lado, Martínez Olivé dijo que no tienen fundamento las declaraciones de que la SEP y SNTE invierten 374 pesos al año en cursos de capacitación por maestro.
Señaló que no es adecuado simplemente dividir los recursos de la inversión para la capacitación con el número total de profesores, porque la decisión de acudir o no a propuestas de carácter formativo es individual y voluntaria.
La subsecretaria de la SEP sostuvo que no existe base alguna para afirmar que las “autoridades educativas deben canalizar recursos para auspiciar cursos de preparación que al menos cuesten siete mil pesos, para tener mejores resultados, pues no es el precio de un curso el que lo hace pertinente y útil para la transformación de la práctica docente”.