La leyenda de “El Chapo” Guzmán
El poderoso líder del Cártel de Sinaloa.
Este domingo se cumple un año de la captura de Joaquín “El Chapo” Guzmán quien fue detenido por elementos de la Secretaría de Marina (Semar), el pasado 22 de febrero del 2014 en Mazatlán, Sinaloa. Aquel día el narcotraficante más buscado del mundo se encontraba en el edificio de condominios “Miramar”, en el cuarto 401 cuando el peso de la ley lo sorprendió.
Cuando se fugó del penal de máxima seguridad en 2001 se convirtió en un dolor de cabeza para los gobiernos de Estados Unidos y México, quienes ofrecían por su captura una recompensa de cinco millones de dólares y de 30 millones de pesos respectivamente.
Guzmán Loera líder del Cártel de Sinaloa de acuerdo con la información de la Procuraduría General de la República (PGR), nació el 4 de abril de 1957 y comenzó en el negocio del narcotráfico como lugarteniente del capo Miguel Ángel Félix-Gallardo en la década de los ochenta.
El 19 de enero de 2001, "El Chapo" se fugó de la prisión de Puente Grande a bordo de un camión de limpieza gracias a la ayuda prestada por algunos funcionarios del penal. Era la primera vez en México que un recluso se evadía de un penal de máxima seguridad.
Su figura se empezó a convertir en leyenda, en Sinaloa se contaban muchas cosas, una de las más famosas era que “El Chapo” acudía a uno de sus restaurantes con un un séquito de guardaespaldas que cerraban el local y pedían amablemente a los clientes que les entregaran los teléfonos celulares. Al irse Guzmán devolvía los equipos y se despedía de los comensales indicándoles que había pagado todas sus cuentas.
El artista grupero conocido como “El compa Chuy”, le cantó el corrido “El autógrafo”, una de sus estrofas cuenta la admiración por el capo criminal de Sinaloa:
"Dicen que anda por la sierra,
otros que por la ciudad,
donde quiera que se encuentre,
él se la sabe rifar,
y aunque el gobierno lo busque no lo vuelve a capturar".