El "Vocho" en extinción en las calles mexicanas
Era uno de los símbolos más populares de Ciudad de México, un simpático ícono cuyas formas redondeadas sedujeron incluso a Hollywood, pero el Volkswagen escarabajo, o "Vocho", casi ha desaparecido de la megaurbe, víctima de una dudosa reputación y de la lucha contra la contaminación.
Algunos "Vochos" aún circulan por las caóticas calles de la capital mexicana y varios clubes de coleccionistas profesan la "Vochomanía", pero los taxis-escarabajo han desaparecido por completo transformando el paisaje urbano.
Desde su llegada al país en 1954, el escarabajo tuvo un éxito espectacular. Económico, fácil de reparar, en un año se vendieron 50 mil unidades. "No tengo auto, tengo 'Vocho'", era la broma mexicana para destacar lo barato del auto.
Fue tal el éxito que el fabricante alemán instaló una fábrica en Puebla en 1964. El escarabajo se volvió mexicano y en 1973 una tercera parte de los automóviles que se vendieron eran "Vochos". Se convirtió en el vehículo más fabricado de la historia con más de 15 millones de unidades producidas, destronando al famoso Ford T. En julio de 2003, llegó a su fin una trayectoria excepcional cuando se armó el último escarabajo en la fábrica de Puebla.