Destrucción de Los Cabos después de "Odile"
Casas, hoteles y comercios sufrieron grandes daños en sus estructuras.
El huracán “Odile”, que tocó tierra la noche del pasado domingo con categoría tres, derribó árboles, postes de electricidad y señales de tráfico a lo largo de la autopista principal, inundada en al menos un lugar.
Muchas casas fueron derribadas. Los vestíbulos y fachadas de varios hoteles también sufrieron daños. Las ventanas del Hotel Westin estallaron en pedazos; barro y rocas bloquearon los accesos al Club Regina y el Hotel Hilton sufrió daños de importancia.
En un hotel cercano a San José del Cabo, los huéspedes tuvieron que moverse de un refugio improvisado a la zona de almacenamiento del sótano después de que estallaran las ventanas.
El huracán, que llegó a alcanzar la categoría 4 y después se degradó. El ojo del huracán estuvo 60 kilómetros al oeste de La Paz y se movía en dirección a norte a 26 Km/h. A media mañana del lunes pasado había dejado de llover y el viento había disminuido.
El sur de Baja California está plagado de complejos hoteleros que se levantan entre pequeñas comunidades pesqueras y barrios humildes. Muchas de las viviendas no están preparadas para soportar huracanes.
Las autoridades mexicanas evacuaron las zonas costeras y prepararon refugios para hasta 30 mil personas.