Tuit y wifi ya en el diccionario de la Lengua Española
Ha dejado entrar 19 mil americanismos como reconocimiento a un idioma universal.
El Diccionario de la Lengua Española ha abierto sus páginas a las novedades del siglo XXI con términos como tuit, wifi, bíper y nube informática, ha ampliado el registro de las relaciones humanas incorporando palabras improbables en ediciones anteriores como amigovio, papichulo y platicón, y ha dejado entrar 19 mil americanismos como reconocimiento a un idioma universal que tiene un 90% de sus hablantes en el continente americano.
En las 2.312 páginas de la 23 edición que acaba de publicarse en conmemoración de los 300 años de la Real Academia Española, América está representada con un sinnúmero de términos como la lonchera para llevar el almuerzo, el taquito para lucirse en el fútbol, la motoneta para pasear, el miguelito para pinchar neumáticos, o las acciones de cajonear y conflictuar para hacerse mala sangre.
El nuevo diccionario, el primero que se publica en 13 años, ya no es presentado por la Real Academia Española sino por la Asociación de Academias de la Lengua (ASALE), que es la organización que nuclea a las 22 academias del idioma español en tres continentes, como una reafirmación de la política panhispánica que se aplica desde hace unas dos décadas. Y en su nueva actitud de apertura incorpora los términos que requieren las novedades de suma actualidad como el dron, la burka o una definición de matrimonio que admite la unión entre personas del mismo sexo.
Marco Martos, el presidente de la Academia Peruana de la Lengua, dijo que "la Real Academia Española está cambiando lentamente de actitud y empieza a considerar el punto de vista americano en el diccionario que se considera de todos". Y Mario Antonio Sandoval, director de la Academia Guatemalteca, afirmó que el nuevo diccionario "recoge de manera clara el trabajo de colaboración de toda las academias hispanoamericanas. Por eso se le puede llamar Diccionario de la Lengua Española, no de la Real Academia Española. El significado de la obra, entonces, es su espíritu y tarea panhispánicos".
Para Francisco Javier Pérez, presidente de la Academia Venezolana de la Lengua, la obra "señala un antes y un después en la concepción del más importante diccionario de la lengua". Nancy Morejón, directora de la Academia Cubana de la Lengua, dijo que el Diccionario representa "un feliz acontecimiento para la enorme comunidad hispanoparlante". Y Susana Cordero, que dirige la Academia Ecuatoriana de la Lengua, afirmó que el nuevo Diccionario "se abre a interminables sugerencias y consigue que todos nos sintamos representados en él: desde España, de tricentenaria academia, hasta los Estados Unidos".