Reino Unido reconoce que monitorea las redes sociales
Charles Farr aclaró que la gran mayoría de los mensajes interceptados no son leídos.
La Agencia de Espionaje Electrónico de Gran Bretaña está legalmente autorizada para realizar un seguimiento de las actividades en línea de millones de británicos que utilizan plataformas con base en los Estados Unidos, tales como Facebook, Twitter y Google, afirmó este martes el principal encargado del antiterrorismo británico.
Los datos que se envían a esos servicios se clasifican como comunicaciones "externas" y no "internas", dado que los servidores de las empresas tienen su base fuera de Reino Unido, señaló Charles Farr, jefe de la Oficina de Seguridad y Antiterrorismo en una declaración hecha pública este martes.
Amnistía Internacional calificó el asunto de "intrusión a escala industrial" pero Farr contestó diciendo que esto no equivale a vigilancia masiva dado que la gran mayoría de los mensajes interceptados no son leídos.
La distinción entre las interacciones internas y externas es significativa porque la agencia de inteligencia electrónica británica, GCHQ, tiene amplios poderes para interceptar las comunicaciones fuera del país, pero necesita una orden y la sospecha de mala conducta para controlar el tráfico nacional de internet.