Refuta gobierno argentino denuncias de fiscal muerto
Alberto Nisman presuntamente se suicidó.
El gobierno argentino comprometió este martes su apoyo a la investigación de la muerte del fiscal que investigaba el ataque terrorista a la AMIA, pero refutó las acusaciones que lanzó en contra de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner por “pactar” con Irán.
“La decisión presidencial es de un apoyo total al esclarecimiento de este hecho”, afirmó el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, un día después de la conmoción que provocó la muerte del fiscal Alberto Nisman, quien presuntamente se suicidó.
El funcionario destacó la decisión de la presidenta, quien horas después del fallecimiento del fiscal ordenó la apertura de los archivos secretos de la AMIA, así como la identificación de los espías involucrados en la causa.
También retomó la extensa carta que Fernández de Kirchner publicó este lunes por la noche y en la que advirtió que era muy sospechoso que Nisman la acusara de querer negociar con Irán y proteger a los terroristas, justo cuando está por comenzar el juicio por encubrimiento de la causa AMIA.
En ese juicio, el principal imputado es el ex presidente Carlos Menem (1989-1999), a quien se le acusa de haber desviado la investigación para lograr la impunidad de un caso en el que hoy, casi 21 años después, no hay un solo acusado en la cárcel.
Capitanich explicó que “curiosa y sugestivamente, cuando está a punto de iniciarse el juicio oral y público por encubrimiento, largamente demandado por la sociedad en general y los familiares en especial, surge el intento de convertir al gobierno” en sospechoso.
Afirmó que el gobierno de Néstor Kirchner (2003-2007) y Cristina Fernández son los que más medidas han tomado en pos del esclarecimiento del atentado ocurrido en 1994 y que dejó un saldo de 85 muertos.
Por ejemplo, enumeró, se ordenó la apertura de archivos, se relevó del impedimento para declarar por parte de agentes de Inteligencia, se asignaron de recursos humanos y económicos inéditos y se hicieron reclamos en el orden internacional y ante Naciones Unidas sin precedentes, que ningún otro presidente había hecho.
“Repito, curiosa y sugestivamente se intenta convertir, 21 años más tarde, en encubridores por tratar de que se le pueda tomar declaración a los imputados iraníes mediante un Tratado Internacional aprobado por ley del Congreso”, añadió.
El jefe de Gabinete se refirió así al Memorándum de Entendimiento que Argentina e Irán firmaron en 2013 y a través del cual la república islámica se comprometió a colaborar por primera vez en la investigación y permitir que los acusados iraníes fueran interrogados en Teherán.
Según el fallecido fiscal Nisman, el acuerdo en realidad fue una maniobra que encabezó la presidenta para ofrecer a Irán la impunidad de sus ciudadanos mediante la eliminación de las “alertas rojas” de detención por parte de Interpol, a cambio de reanudar las relaciones comerciales.
Capitanich recordó que la propia Interpol ya desmintió a Nisman al asegurar que jamás hubo siquiera una sugerencia de eliminar las órdenes internacionales de captura, además de que el comercio entre Argentina e Irán decreció.