Realizan concurso de llantos y berrinches en Tokio
Más de 100 niños de entre seis y 18 meses compitieron.
En Tokio se lleva a cabo un insólito ritual en el que luchadores de sumo hacen llorar a bebés mientras los padres observan orgullosos los berrinches de sus pequeños.
Por extraño que parezca, se trata de un ritual ancestral japonés que se cree da salud a los niños.
"La historia de que los sumos hagan llorar a los bebés viene de hace 400 años y es una tradición japonesa que se hace en santuarios de todo el país. Este es el sexto año que hacemos el evento en este santuario porque queremos mostrar a Dios la buena salud de estos niños”, explica el sacerdote Yoshimi Morita.
Más de 100 niños de entre seis y 18 meses compitieron en Tokio. Las reglas varían según la región. En algunos lugares gana el que llore primero, mientras que en otros es al contrario.