Prevén declarar libre de Ébola a Nigeria

AFP Lagos 19-10-2014 08:32

El virus ha cobrado la vida de cuatro mil 555 personas en siete países.

Nigeria, el país más poblado de África, podría ser declarado libre de Ébola este lunes, tres meses después que se detectara el primer enfermo gracias a una reacción inicial eficaz y pese a un precario sistema de salud.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) se apresta a declarar el fin oficial de la epidemia en Nigeria, como hizo con Senegal, al término del periodo requerido de 42 días desde la detección del último caso.

Sin embargo, aún hay alarmas por el funcionario liberiano Patrick Sawyer, quien murió por el virus en una clínica privada, cinco días después de su llegada a Lagos, una megalópolis de más de 20 millones de habitantes, con hospitales públicos en condiciones precarias, sin agua potable y sin médicos pues están en huelga por sus precarias condiciones de trabajo.

La epidemia fue contenida con un saldo de 20 víctimas, entre ellos ocho muertos, en este país de 170 millones de habitantes. El Ébola ha cobrado la vida de cuatro mil 555 personas en siete países.

En Nigeria, como en Senegal las claves fueron una reacción muy rápida de las autoridades y el despliegue de equipos encargados de vigilar a todas las personas que estuvieron en contacto con los enfermos.

Esta minuciosa tarea fue posible en una ciudad como Lagos, gracias a un dispositivo de urgencia ya existente, destinado a la lucha contra la Poliomelitis y a los especialistas del Centro Estadounidense de Control y Prevención de Enfermedades (CDC), presentes en Nigeria.

Alrededor de 900 casos considerados de riesgo fueron seguidos en Lagos y Port-Harcourt, donde un colega de Sawyer, infectado, huyó y contagió a su vez a un médico.

En total, mil 800 personas fueron movilizadas, explicó el doctor Faisal Shuaib, al frente del Centro Operacional de Emergencia contra el Ébola.

Es importante que el Estado esté preparado para desbloquear fondos rápidamente y que se continúe sensibilizando a la población, puesto que la "amenaza sigue ahí", según John Vertefeuille, del CDC.