Papa Francisco pone de moda ser católico tras un año de trabajo
No todo el mundo está encantado.
Desde sus sencillas frases hasta su ruptura de las reglas del Vaticano, el papa Francisco ha puesto de moda ser católico durante su primer año.
Puede que no disfrute su estatus de superestrella, pero sin duda sabe cómo seducir a la multitud y se ha hecho querer por el público al cuidar de los pobres y cambiar radicalmente el enfoque de la iglesia hacia la misericordia en lugar de la moralización.
"Ahora la gente dice feliz, 'bueno, en realidad yo soy católico', y a veces están bastante dispuestos a dejarse conocer como católicos", dijo el cardenal británico Vincent Nichols.
"Y pienso que ese es el efecto del papa Francisco. Hay credibilidad en torno al proyecto católico", añadió.
Pero no todo el mundo está encantado y las expectativas son altas para su segundo año, con viajes muy publicitados, la reforma del Vaticano y una agenda que incluye temas candentes como la familia y el sexo.
Algunos momentos clave en el primer año de Francisco dan una idea de lo que puede deparar el futuro para la Iglesia Católica de mil 200 millones de fieles.