Papa condena corrupción que quita recursos a los pobres
El prelado llamó a romper las cadenas de la injusticia social.
El Papa Francisco condenó este viernes en Manila la corrupción que quita recursos a los pobres y llamó a “romper las cadenas de la injusticia” social, en su primer día de visita a Filipinas.
Esto durante un encuentro con autoridades políticas y miembros del cuerpo diplomático en el Palacio Presidencial de Malancañan y tras haberse reunido en privado con el mandatario Benigno Aquino III.
La tradición bíblica “prescribe a todos los pueblos el deber de escuchar la voz de los pobres y de romper las cadenas de la injusticia y la opresión que dan lugar a flagrantes e incluso escandalosas desigualdades sociales”, dijo.
En un discurso pronunciado en inglés, instó a combatir “cualquier forma de corrupción que sustrae recursos de los pobres”, pidió apoyo para la familia y respeto por “el derecho inalienable a la vida, desde la de los no nacidos hasta la de los ancianos y enfermos”.
Expresó su cercanía a las familias de las víctimas y a los afectados por el tifón Yolanda, que golpeó al país en noviembre de 2013. Confesó su admiración por la fuerza heroica, la fe y la resistencia demostrada por muchos filipinos frente a ese y otros desastres naturales.
“La reforma de las estructuras sociales que perpetúan la pobreza y la exclusión de los pobres requiere en primer lugar la conversión de la mente y el corazón”, agregó.
Tras su encuentro con los políticos, el líder católico se dirigió a la catedral de Manila donde sostuvo un encuentro con 300 niños pobres, rescatados de la vida en la calle y de la prostitución, que no estaba previsto en el programa oficial.
En el patio del templo Francisco saludó uno por uno a los jóvenes, muchos de ellos lo abrazaron y le entregaron regalos. Más tarde, en la misa, volvió a referirse a los pobres y llamó a los católicos a no olvidarse de ellos.
“Los pobres son el centro del evangelio, son el corazón del evangelio. Si los quitamos del evangelio no podemos comprender el mensaje de Jesucristo...”, advirtió.
La visita de cinco días de Francisco —la primera de un Papa a Filipinas en 20 años— se desarrolla en medio de un fuerte dispositivo de seguridad en que participan 17 mil soldados y 25 mil policías.
Entre sus actividades oficiales destacan una visita de cortesía al presidente Benigno Aquino III y una reunión con autoridades y cuerpo diplomático de El Vaticano, así como una misa en la Catedral de Manila con obispos, sacerdotes y religiosos.
Para el sábado tendrá diversas ceremonias en la Arquidiócesis de Palo, centro-este del país, y el domingo reuniones con jóvenes en la Pontificia Universidad de Santo Tomás. El lunes 19 el Papa viajará de regreso a Roma.