ONU acusa al EI de genocidio y crímenes contra la humanidad
Según un informe publicado por la Oficina de Derechos Humanos de la ONU, el EI cometió crímenes internacionales en Irak.
El grupo yihadista Estado Islámico (EI), pudo haber cometido tres de los más graves crímenes internacionales -genocidio, crímenes contra la humanidad y crímenes de guerra- en Irak, según un informe publicado por la Oficina de Derechos Humanos de la ONU.
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH) identificó un patrón manifiesto de los ataques contra “cientos” de yazidis y subrayó la intención del EI de “eliminar a los yazidis como grupo”.
El informe, elaborado por un equipo de investigación enviado a la zona por la oficina del ACNUDH a finales del año pasado, se basa en entrevistas con más de 100 personas que fueron testigos y pudieron sobrevivir ataques en Irak cometidos por el grupo islámico extremista entre junio de 2014 y febrero de 2015.
Según los hallazgos de los investigadores, el EI es responsable de cometer asesinatos, tortura, violación y esclavitud sexual, conversiones religiosas forzadas y el reclutamiento de niños, todo ello de forma sistemática y generalizada.
En numerosos pueblos yazidíes, hombres y niños mayores de 14 años fueron separados de las mujeres y las niñas.
Los hombres fueron fusilados por el EI, mientras las mujeres que secuestraron fueron consideradas "botín de guerra", muchas de ellas sujetas a severa violencia sexual, incluyendo repetida violación a niñas de 6 a 9 años.
El informe describe que fueron obligados a ver videos de decapitaciones como parte de su adoctrinación y a un niño se le dijo: "Esta es tu iniciación al yihad ... tú eres ahora un niño del Estado Islámico".
Asimismo, alrededor de 600 hombres recluidos en la prisión Badush, en su mayoría chií, fueron trasladados en camiones a un barranco, donde fueron fusilados por los combatientes de EI.
La misma suerte corrieron personas percibidas como leales al gobierno. Entre mil 500 y mil 700 cadetes del ejército Speicher fueron masacrados por los combatientes del EI el 12 de junio.
Por su parte, miembros de las fuerzas de seguridad iraquíes y las milicias afiliadas "llevaron a cabo ejecuciones extrajudiciales, torturas, secuestros y desplazamiento forzado en un ambiente de impunidad”.
Es por ello que el informe del ACNUDH, dado a conocer en Ginebra, también los acusa de haber cometido “crímenes de guerra”.
Finalmente, en vista de estas acusaciones como genocidio o crímenes contra la humanidad, el informe llama a rendición de cuentas y recomienda que Irak sea parte del Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional y llama al Consejo de Seguridad a referir el caso a dicha corte.