Obtiene partido anti austeridad griego mayoría en el Parlamento
Según encuestas de salida, Syriza se quedaría con 158 de los escaños.
Los griegos rechazaron la política de austeridad impuesta por la UE, al otorgar, según los sondeos a pie de urna, una amplia ventaja al partido opositor de izquierda radical Syriza de Alexis Tsipras, en las elecciones legislativas de este domingo.
Syriza habría obtenido entre 8.5 y 16.5 puntos de ventaja sobre el partido gobernante Nueva Democracia del primer ministro conservador, Andonis Samarás, y obtendría entre 146 y 158 escaños en el Parlamento griego. La mayoría absoluta se encuentra en los 151 diputados.
"Es una victoria histórica" y "un mensaje que afecta no solo a los griegos sino que resuena en toda Europa y trae alivio", dijo triunfal el portavoz de Syriza, Panos Skourletis, a la televisión Mega.
Tras conocerse estos sondeos, una explosión de alegría estalló en la sede de la campaña electoral del partido austeridad, en pleno centro de Atenas.
Las estimaciones de las encuestas otorgan entre el 35.5% y el 39.5% de los sufragios al partido de Tsipras, mientras que Nueva Democracia se alzaría con entre el 23% y el 27% de los votos.
Los socios europeos de Grecia, preocupados por la intención de Syriza de renegociar la enorme deuda griega y de desafiar los programas de austeridad impuestos por Bruselas, siguieron de muy cerca estos comicios legislativos.
En Europa, las otras formaciones de izquierda radical, como Podemos en España, se beneficiarán de la victoria de sus homólogos griegos.
Antes del cierre de la votación, el líder de Podemos, Pablo Iglesias, dijo en la ciudad española de Valencia (este): "¡Comienza la esperanza, termina el miedo!. Syriza, Podemos, venceremos".
Con este resultado, los griegos castigan al gobierno de Samarás, quien tuvo que aplicar las reformas impuestas por los acreedores de Grecia, la UE y Fondo Monetario Internacional (FMI), a cambio de 240 mil millones de euros prestados al país desde 2010.
Pero estas reformas pasaron factura a la población, víctima de una tasa de desempleo del 25% y de drásticas reducciones salariales. En los últimos cinco años, el Producto Interno Bruto griego ha perdido un cuarto de su valor.