Obama y Raúl Castro hablaron por teléfono sobre normalización de relaciones
Dialogaron durante aproximadamente una hora.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y su homólogo de Cuba, Raúl Castro, hablaron este lunes por teléfono para cerrar el acuerdo por el que ambos países se han comprometido a iniciar un diálogo para restablecer sus relaciones diplomáticas, según dijeron este miércoles altos funcionarios de la Casa Blanca.
En una conferencia telefónica, los funcionarios indicaron que Obama y Raúl Castro dialogaron durante aproximadamente una hora, en lo que supuso el primer contacto entre los líderes de ambos países en más de medio siglo.
Los funcionarios revelaron también que las conversaciones secretas entre las delegaciones gubernamentales de ambos países para explorar la normalización de las relaciones comenzaron hace meses y que Canadá acogió la mayoría de las reuniones.
El expresidente cubano Fidel Castro "no participó en las discusiones" de forma directa, pero sí autorizó a su equipo a negociar.
El Vaticano también facilitó los contactos, recibiendo a delegaciones de los dos países, y el papa Francisco se involucró personalmente en las negociaciones con el envío de cartas a Obama y a Raúl Castro, en las que abogaba por la liberación del estadounidense Alan Gross y de los tres espías cubanos presos en Estados Unidos.
Gracias a ese proceso, ambos países se han comprometido a iniciar un diálogo sobre el restablecimiento de sus relaciones diplomáticas que incluirá la apertura, dentro de unos meses, de embajadas en La Habana y Washington.
Altos funcionarios estadounidenses señalaron que la decisión de Obama supondrá el cambio más significativo en la política estadounidense hacia Cuba "en más de cincuenta años", pues el presidente de Es cree que las medidas de acercamiento a Cuba son "una herramienta mejor que el aislamiento" al que se ha sometido a la isla en las últimas décadas.
Las medidas incluyen, entre otras, la flexibilización de las restricciones a los viajes y el comercio entre Estados Unidos y Cuba, así como a las remesas que reciben los cubanos desde territorio estadounidense, según las fuentes.
Estados Unidos decretó en 1961 un embargo económico unilateral sobre Cuba que se mantiene hasta hoy y cuya suspensión depende de la aprobación del Congreso estadounidense, algo improbable en este momento.
Además, Obama ha pedido a su secretario de Estado, John Kerry, que revise la inclusión de Cuba en la lista de países a los que Estados Unidos considera patrocinadores del terrorismo.