Junta tailandesa obliga a guardar silencio
Los que se nieguen continuarán en prisión.
La junta gobernante de Tailandia halló una nueva forma de controlar a sus opositores y obligarlos a guardar silencio: ponerlos en libertad a condición de que prometan no hacer nada "provocador".
Los que se nieguen continuarán en prisión.
Las restricciones fueron confirmadas este miércoles, tanto por el ejército como por algunos detenidos que ha mantenido aislados desde hace una semana, quienes dicen haber sido liberados sólo después de firmar un documento en que acceden a no decir ni hacer nada que pueda atizar conflicto.
Este día, la junta indicó que una repentina interrupción del acceso a Facebook no forma parte de una política de censura, sino que se debe a una falla técnica.
El bloqueo de la tarde no afectó a todos los usuarios, pero atrajo mucha atención en internet. Duró al menos una hora y ocurrió justo un día después que el nuevo gobierno militar anunció la aplicación de medidas enérgicas sobre la red mundial. La junta prohibió diseminar información que pueda generar agitación, con lo que en la práctica prohibió las críticas al golpe de Estado de la semana pasada.