Impiden marcha anual de migrantes en México
Fueron disuadidos por los retenes de vigilancia
Unos 200 inmigrantes centroamericanos que planeaban participar en la protesta anual del "Viacrucis" fueron disuadidos por los retenes de vigilancia y las amenazas de detenerlos, dijo un activista.
Desde hace años, los migrantes cargan cruces de madera en marchas de protesta durante la Semana Santa para realzar su sufrimiento a manos de delincuentes y policías corruptos.
Sin embargo, el sacerdote Alejandro Solalinde, que dirige un albergue para migrantes, dijo ayer sábado que las autoridades amenazaron con arrestar por tráfico de personas a los dueños de los autobuses rentados para el traslado de los manifestantes de la localidad de Ixtepec, en el estado de Oaxaca, a la capital.
Dijo que los manifestantes tenían previsto marcharse el jueves de la Ciudad de México.
Casi 200 migrantes más llegaron y se quedaron en el albergue en Ixtepec porque temen ser detenidos en los retenes de migración cercanos a la localidad, debido a lo cual Solalinde y sus voluntarios enfrentan dificultades para alimentar y albergar a casi 420 hombres. Solalinde describió la situación como "crítica".
El Instituto Nacional de Migración de México dijo en un comunicado que mantienen sus retenes a cuando menos 10 kilómetros de Ixtepec, que sus agentes están desarmados y observadores de derechos humanos se encuentran en la zona.
Dijo que los retenes instalados en carreteras son necesarios para detectar a los inmigrantes que se encuentran sin permiso en el país así como a contrabandistas de personas y contribuyen a "garantizar la seguridad de los extranjeros".
Solalinde dijo que las redadas que comenzaron el verano pasado para evitar que los migrantes viajen de polizones en el tren los ha forzado a utilizar rutas más peligrosas.