HRW pide al nuevo presidente afgano detener la ejecución de cinco violadores
Alegan irregularidades en el proceso judicial.
La organización defensora de los derechos humanos “Human Rights Watch” solicitó este martes al nuevo presidente afgano, Ashraf Gani, que detenga la ejecución prevista para mañana de cinco violadores convictos tras un proceso que, según HRW, estuvo plagado de irregularidades.
"El presidente Gani ha pedido que se revise el sistema judicial afgano, pero ahora tiene una oportunidad inmediata de detener un grave error de la justicia", afirmó en un comunicado el subdirector para Asia de HRW, Phelim Kine.
Según HRW, el proceso judicial contra los violadores ha estado plagado de irregularidades "desde el comienzo, comenzando con las declaraciones públicas del anterior presidente, Hamid Karzai, pidiendo antes de que comenzase el juicio una rápida sentencia a muerte" hasta alegaciones de confesiones bajo coacción.
Karzai, que cedió su cargo hace una semana, firmó el pasado 27 de septiembre la orden de ejecución de los cinco condenados por la violación en grupo de cuatro mujeres en Kabul.
El anuncio de la ejecución fue hecho por un funcionario de alto nivel de la Fiscalía General, Ata Mohamed Noori, que aseguró que tendrá lugar mañana en la prisión de Pul-e-Charkhi, en el este de Kabul, según el canal afgano Tolo TV.
La Fiscalía había acusado a diez personas, de las que siete fueron detenidas y las otras tres huyeron, por la agresión sexual cometida el 29 de agosto en Kabul.
Cuatro de los acusados ya habían estado encarcelados en varias ocasiones, uno de ellos por violación.
El siete de septiembre, un tribunal de primera instancia condenó a los siete detenidos a la pena de muerte, pero una semana después un juzgado de segunda instancia conmutó la condena por otra de veinte años de prisión para dos de ellos, por falta de pruebas en el delito de violación.
El suceso ocurrió cuando los asaltantes, que al parecer iban vestidos de policías, pararon a las afueras de Kabul cuatro vehículos que regresaban de una boda, robaron a los pasajeros, llevaron a las cuatro mujeres a un lugar apartado y las violaron.
Una de las víctimas falleció posteriormente en el hospital y el caso suscitó una ola de reacciones en las redes sociales en Afganistán, algo inusual en un país muy tradicional y machista, en el que muchas mujeres víctimas de un asalto sexual pueden ser luego encarceladas acusadas de haber cometido un "crimen moral".