EU justifica disparo de agente contra indocumentado
Actuó de manera justificada; temía por su seguridad, aseguran.
Autoridades judiciales de Estados Unidos defendieron a un agente de la Patrulla Fronteriza que disparó y lesionó a un inmigrante indocumentado mexicano, al argumentar que actuó de manera justificada porque temía por su seguridad.
En el inicio del juicio en una Corte Federal de Tucson, el mexicano Jesús Castro Romo demandó una indemnización no especificada luego de las lesiones que le causó el agente de la Patrulla Fronteriza identificado como Abel Canales.
La indemnización que demanda Castro Romo es en compensación por el dolor, los gastos médicos, la pérdida de ingresos y la pérdida de disfrute de la vida que supuestamente sufrió tras ser lesionado por Canales el 16 de noviembre 2010, en el desierto del sur de Arizona.
El caso de Castro Romo ha sido destacado entre las estadísticas de incidentes de abuso de fuerza por parte de los agentes fronterizos recabadas en los últimos años por grupos de derechos civiles.
La procuradora federal, Johanna Hamburger, consideró que las lesiones sufridas por Castro Romo fueron “el resultado de malas decisiones que él hizo”.
En su exposición inicial sobre el caso, Hamburger aseguró que Castro Romo no colaboró con el agente de la Patrulla Fronteriza que lo detuvo junto a otros inmigrantes indocumentados al oeste de la comunidad fronteriza de Nogales, Arizona.
La fiscal federal aseveró que el mexicano recogió una piedra con la intención de lanzarla contra el agente, dejando a Canales sin más remedio que dispararle.