Empleados de la reina Isabel II votan a favor de una huelga de celo
Se negarán a realizar las tareas no remuneradas que les sean solicitadas.
El personal de vigilancia del castillo de Windsor votó a favor una huelga de celo (cumplimiento estricto de la normativa laboral), la primera en la historia de esta propiedad real, para protestar contra sus condiciones salariales, anunció el miércoles el sindicato PCS.
Los 76 vigilantes del castillo, una de las residencias de la reina Isabel II de Inglaterra, representados por este sindicato (de un total de un centenar) votaron al 84% a favor de una acción para protestar por tener que asumir tareas suplementarias no remuneradas.
El PCS afirma que a estos empleados, con una remuneración a partir de 14 mil 400 libras anuales (19 mil 970 euros), se les exige que organicen visitas o ejerzan de intérpretes para los visitantes de este castillo de 900 años de antigüedad situado al oeste de Londres, sin una contrapartida salarial.
Las responsabilidades de este personal se limitan normalmente a la vigilancia del lugar, especialmente sus obras de arte, y asistir a los visitantes a la entrada del palacio y en sus dependencias.
La protesta, que comenzará a finales de abril, tomará la forma de una huelga de celo: los empleados se negarán por ejemplo a realizar las tareas no remuneradas que les sean solicitadas.
"Estos leales trabajadores son el rostro visible del castillo de Windsor" y deberían "ser convenientemente remunerados por su compromiso para lograr que visitantes del mundo entero disfruten su visita al castillo", consideró Mark Serwotka, secretario general del sindicato, en un comunicado.
La reina Isabel II pasa habitualmente sus fines de semana en Windsor, donde también organiza banquetes y cenas de Estado. Asimismo, cada año reside en el castillo durante el periodo de Pascua.