El hospital de las estatuas
Brazos estropeados, narices rotas, manos quebradas, encuentran remedio en un peculiar "hospital de estatuas" en la capital argentina donde esculturas centenarias vandalizadas o desgastadas por el tiempo recobran su esplendor original.
Desperdigadas en un taller al aire libre que funciona en el barrio de Palermo, decenas de estatuas de parques y jardines de Buenos Aires, Argentina, esperan su turno.
Con fotografías antiguas, un puñado de artistas trabaja no sólo para reparar el mármol roto, remover el aerosol de maliciosos "grafitis" y restaurar las huellas de años a la intemperie.
También deben crear piezas faltantes, dedos, manos o pies que ya no existen sin traicionar la obra original.