Dilma Rousseff promete combatir la corrupción
Esto, luego de la protesta social masiva realizada este domingo en Brasil.
El gobierno de la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, prometió este domingo que en “días” habrá acciones contra la corrupción en medio de una enorme protesta social que congregó a casi dos millones de brasileños en 74 ciudades del país.
Cifras policiales dijeron que 1.8 millones de personas salieron a las calles de todo el país, en un total de 19 estados, en la mayor manifestación contra el gobierno de Rousseff desde las protestas de junio de 2013.
Sao Paulo, un firme bastión opositor a la presidenta Rousseff y del Partido de los Trabajadores (PT), que hace sólo cinco meses garantizó la reelección presidencial, fue la urbe brasileña más activa con un millón de personas que rechazó la gestión de Rousseff.
En un clima cívico, los manifestantes tomaron la Avenida Paulista –sede del poder financiero- y lanzaron sus proclamas contra Rousseff y su Ejecutivo, a quien culpan del mal curso de la economía del país y de los escándalos de corrupción en la petrolera estatal Petrobras.
El ministro de Justicia, José Eduardo Cardozo, dijo en una rueda de prensa en el Palacio del Planalto –sede de la presidencia- que el gobierno tomaría nota de las manifestaciones y abrirá un diálogo.