Deja Brewer gobierno de Arizona tras 6 años de política antinmigrante
Bajo su mandato se promulgó la ley estatal de inmigración.
La gobernadora de Arizona, Jan Brewer, dejará su cargo mañana lunes y pondrá fin a un periodo de gobierno de seis años que quedó marcado por su controversial intento de impulsar leyes estatales en contra de la inmigración ilegal.
Brewer concluirá oficialmente su mandato la mañana de este lunes momentos antes de la ceremonia de juramentación de Doug Ducey, como nuevo gobernador de Arizona.
Bajo la administración de Brewer, Arizona se convirtió en la primera entidad en promulgar una ley estatal de inmigración, lo que generó una fuerte discusión sobre si las entidades tenían el derecho o no de diseñar y aplicar sus propias leyes migratorias.
La decisión de Brewer de promulgar en abril de 2010 la polémica ley antiinmigrante SB 1070, la colocó en la primera fila del debate nacional sobre la seguridad fronteriza y la reforma a las leyes de inmigración.
Así se convirtió en una heroína de sectores conservadores que promueven medidas policiales de control migratorio.
La SB 1070 pretendía establecer como delito el ser inmigrante indocumentado y obligar a los policías estatales y locales el detener a una persona sospechosa de estar en forma ilegal en el país.
La promulgación de la ley condujo a la gobernadora Brewer a una confrontación directa con la administración del presidente Barack Obama.
El gobierno federal interpuso demandas en contra de la legislación, al sostener que la inmigración era un asunto exclusivo del orden federal.
En junio de 2012, la Suprema Corte de Justicia de Estados Unidos desechó tres de los cuatro grandes apartados de la SB 1070 y solo permitió uno que autoriza a los policías de esta entidad revisar el estatus migratorio de un detenido, si hay sospechas razonables de que es indocumentado.
Sin embargo, el fallo del máximo tribunal del país no puso fin a los intentos de la gobernadora por buscar nuevas medidas de control migratorio, como su orden ejecutiva de impedir que los jóvenes indocumentados conocidos como “dreamers” obtuvieran licencias de conducir en Arizona.
La gran mayoría de esos intentos fueron combatidos y derrotados en las cortes. Brewer ha insistido siempre que su única intención ha sido simplemente hacer cumplir la ley.