Continúa tragedia en Colombia por deslave; aumentan cifra a 61 muertos
Una de las peores tragedias naturales de los últimos años en Colombia se cobró la vida de al menos 61 personas y dejó un número no precisado de desaparecidos en la localidad de Salgar (noroeste), donde un deslave arrasó un caserío cuando sus habitantes dormían en la madrugada.
Salgar, un pueblo de agricultores de unos 18 mil habitantes del departamento de Antioquia, se despertó cuando todavía no había salido el sol con la terrorífica imagen de una zona de desastre por las toneladas de lodo que arrastraron casas con personas, vehículos, árboles, cultivos y todo lo que había a su paso.
Unas 500 personas que habitan en Las Margaritas, un corregimiento de Salgar, dormían a las 3:00 horas de la madrugada cuando fueron sacadas de sus casas por la furia de la naturaleza y los que pudieron, corrieron en medio de la oscuridad de la noche para ponerse a salvo con sus hijos, padres y hermanos, según relatos de los supervivientes.
Después de dejar un rastro de muerte y destrucción en Las Margaritas, la riada avanzó hacia el perímetro urbano de Salgar, donde tres barrios también sufrieron las consecuencias de esta tragedia natural.
Según la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), "se registran 61 personas fallecidas. Los cuerpos están siendo trasladados a Medicina Legal en Medellín en donde se realizará el proceso de identificación".
Además de los 61 muertos contabilizados por la UNGRD con base en informaciones de las autoridades de Antioquia, la avalancha causó 37 heridos, la mayoría de ellos fuera de peligro, un número indeterminado de desaparecidos, 333 personas damnificadas y 31 viviendas afectadas.
A medida que pasan las horas la cifra de víctimas mortales aumenta por el hallazgo de cadáveres de personas que estaban desaparecidas, que son buscadas por 166 socorristas de diferentes organismos, mientras los vecinos aguardan frente al cementerio del pueblo alguna información sobre sus familiares o amigos.
Ante la magnitud de la tragedia, el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, se trasladó inmediatamente a Salgar, municipio distante unos 97 kilómetros de Medellín, donde declaró la zona del desastre como "calamidad pública" para poder disponer de flexibilidad administrativa en la utilización de los recursos públicos que se requieran.
Prometió que el Gobierno dará todas las ayudas materiales que sean necesarias a los afectados, pues es lo que se puede hacer en estos casos, porque, dijo, "nadie nos va a devolver a los muertos".
Santos añadió que como Salgar no cuenta con cámaras frías para su preservación, "sería un desastre" mantener los cadáveres en el pueblo mientras se completa el proceso de identificación y por eso se decidió llevarlos a Medellín.