Censuraría nueva ley a ciertos autores literarios en Rumania
¿Se pueden leer las obras de Emile Cioran o mencionar a Mircea Eliade sin exponerse a una condena por exaltación del fascismo? Una ley de memoria histórica adoptada por Bucarest suscita un fuerte debate sobre un pasado con el que Rumanía aún no se ha reconciliado.
El texto, aprobado recientemente por una gran mayoría en el Parlamento rumano, prohíbe el negacionismo y las organizaciones y símbolos fascistas, así como el culto a personajes culpables de genocidio o de crímenes contra la humanidad.
Destinada a corregir las lagunas e imprecisiones de un primer texto aprobado en 2002, la nueva ley pone de manifiesto la participación de Rumanía en el Holocausto, una sombría página en su historia, que Bucarest solo reconoció en 2004.
La legislación ha despertado una fuerte polémica en Rumanía. Varios escritores y analistas han manifestado su temor de que, de ahora en adelante, no se pueda leer o citar las obras de estos últimos u otros grandes autores de la literatura rumana.
La editorialista Clarice Dinu, del diario Gandul, teme que "organizar debates sobre esos temas o mencionar en Facebook a personas incriminadas por esa ley" puedan ser penados a partir de ahora, y critica la posible figura de los eventuales "policías de internet" que deberán vigilar el respeto a la nueva norma.