Arrestan a más de 100 activistas por protestar a favor de reforma migratoria
Pedían alivio para 11 millones de indocumentados frente a la Casa Blanca.
Más de un centenar de activistas a favor de una reforma migratoria justa se dejaron arrestar este jueves frente a la Casa Blanca en un acto de desobediencia civil para reclamar al presidente de EU, Barack Obama, un alivio para los 11 millones de indocumentados que corren el riesgo de ser deportados.
Las detenciones, cerca de 140, según los organizadores, fueron la culminación de una marcha que comenzó ante la Oficina de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) para pedir a Obama que legalice "a la mayor cantidad de inmigrantes como le sea posible".
El director ejecutivo de la organización Casa Maryland, Gustavo Torres, dijo que el presidente estadounidense "puede y debe" detener las deportaciones, que separan a familias enteras.
"Pedimos a Obama un alivio justo y necesario para las comunidades de inmigrantes en el país", subrayó Torres ante unas quinientas personas entre jóvenes, madres, niños y familias enteras.
A finales de junio, Obama dijo que tomaría acciones ejecutivas antes de que acabara el verano para arreglar lo máximo posible el sistema de inmigración, pero este jueves el mandatario no se refirió a esa promesa de actuar antes del fin del periodo estival.
"Sigo creyendo que si no puedo ver acciones en el Congreso, tengo que hacer al menos lo que yo pueda para hacer que el sistema funcione mejor", indicó Obama en una conferencia de prensa en la Casa Blanca.
No obstante, dijo que algunas crisis en los últimos meses "afectan al cronograma" anunciado en junio y evitó establecer una fecha aproximada para su anuncio de acciones ejecutivas.
Los activistas prorreforma se dirigieron desde la sede del ICE a la Casa Blanca, donde protagonizaron un acto de desobediencia civil.
Los manifestantes se sentaron frente a la verja que circunda la residencia presidencial y fueron arrestados entre los aplausos de los centenares de personas que participaron en la marcha.
Con más de 52 eventos celebrados durante agosto en todo el país, este acto de desobediencia civil en la capital estadounidense culmina las movilizaciones para presentar estas demandas y ejercer influencia ante el esperado anuncio de medidas ejecutivas por parte de Obama, previsto para el final del verano.