Argentina y Rusia firman acuerdos de cooperación nuclear
Putin se encuentra de gira por Latinoamérica.
La presidenta de Argentina, Cristina Fernández, firmó un acuerdo de cooperación nuclear con fines pacíficos con su colega ruso Vladimir Putin, quien se encuentra en Buenos Aires como parte de una gira por Latinoamérica.
Los mandatarios se reunieron en la presidencial Casa Rosada, en Buenos Aires, segunda escala del viaje oficial que Putin comenzó la víspera en Cuba y que continuará mañana domingo en Brasil, a donde asistirá a la final del Mundial de Futbol entre Argentina y Alemania.
Después del encuentro, que duró dos horas, ambos países firmaron una serie de acuerdos entre los cuales destaca un convenio de colaboración nuclear, un sector en el que Argentina es líder en América Latina.
En una presentación conjunta ante la prensa, Fernández aseguró que este país seguirá desarrollando la energía nuclear con fines estrictamente pacíficos, ya que todos sus convenios en la materia están sujetos al Acuerdo de No proliferación de Armas Nucleares.
Asimismo, reveló que hace pocos días entró en estado crítico la Central Atómica Atucha II, en la provincia de Buenos Aires, cuyas obras se suspendieron en 1994 y que por decisión del fallecido ex presidente Néstor Kirchner se pusieron en marcha una década después.
“Fuimos los argentinos, con sus científicos, con sus técnicos, los que la terminamos y la pusimos en marcha. Tenemos muchos deseos de profundizar esta relación con Rusia porque uno de los acuerdos versa sobre esta cuestión”, dijo.
Argentina cuenta con las terminales nucleares Atucha I, II y III, y la Central Nuclear Embalse, en la ciudad de Córdoba, pero ahora Rusia cooperará en la construcción de Atucha IV, la primera central atómica que se alimentará con uranio enriquecido y agua liviana en este país.
Putin explicó que varias compañías rusas ya están interesadas en participar en la modernización de la potencia generadora en Argentina con la construcción de una nueva central con un valor de dos mil millones de dólares, así como en el suministro de turbinas.
Luego, el mandatario ruso volvió a Buenos Aires, donde la presidenta le ofreció una cena de honor a la que fueron invitados los presidentes de Uruguay, José Mujica; Bolivia, Evo Morales, y Venezuela, Nicolás Maduro.
La visita de Putin desató algunas protestas en Buenos Aires por parte de manifestantes que reclamaron sus políticas homófobas y su involucramiento en la crisis en Ucrania.
